Es evidente la falta de racionalidad que manifiestan las autoridades del Partido Revolucionario Dominicano después de su convención. Las decisiones tomadas han resultado nefastas al interior de su organización, y más grave aún porque han sido exhibidas con reiteradas torpeza ante la opinión publica, poniendo al filo del abismo la división del mayor partido de oposición del país.
La errada decisión de expulsar sumariamente al presidente de la Comisión Nacional Electoral el Dr. Enmanuel Esquea Guerrero por un grupo de seguidores del Ing. Miguel Vargas Maldonado, lacera la delicada situación que enfrenta ese importante partido político y pone en moda la frase popular que dice; “el loco anda suelto”.
A pesar del control que tiene el Ing. Vargas Maldonado sobre las estructuras del PRD, la sociedad dominicana y la base de ese partido reconocen como único ganador de la convención al Ing. Hipólito Mejía Domínguez, pues este control casi absoluto de Miguel sobre el partido, solo permite que sus asesores recomienden y aprueben bellaquerías contra Hipólito y contra todos aquellos que no apoyen sus travesuras.
Todas estas acciones, lo que contribuye es a profundizar aún más la división del llamado “buey blanco que más jala”.
Es lamentable que Miguel Vargas Maldonado no acepte reconocer con dignidad su derrota, por el contrario prefiere la división de su partido para que un Hipólito Mejía no alcance el poder en las próximas elecciones.
Realmente, esta crisis no parece ser una crisis política, sino un duelo personal entre los dos dirigentes, a pesar del vínculo familiar que les une. Hemos observado los enfrentamientos verbales que han sostenido algunos seguidores de los precandidatos durante el día de hoy frente al local principal de la organización.-
No hay dudas, de que las autoridades del PRD han perdido la razón y es necesario que en estos momentos retomen la prudencia y se reúnan en armonía con mediadores calificados, para evitar enfrentamientos lamentables que provoquen que se suele el loco y ocurran conflictos impredecibles.
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